Juega con tu bebé
Alimentación
¡Tac, tac! Con la cuchara o la taza de tu bebé da golpecitos rítmicamente mientras cuentas: “1, 2, 3”. Dale la cuchara o taza a tu bebé y anímalo a imitarlo. Así practica la coordinación visomotora y entiende cómo se producen los sonidos.
Juegos al aire libre
¡Mi vecindario! Cuando salgas de paseo con el cochecito o carriola, señala todos los lugares que vean y describe lo que hace la gente. Tu bebé se familiarizará con los lugares y la gente de sus alrededores.
A dormir
¡A ponerse la pijama! Cuando prepares a tu bebé para acostarlo, deja que él ayude a desvestirse y vestirse. “Ahora, levanta los brazos” o “Saca el pie…” Demuéstrale cómo hacerlo y anímalo a imitarte. Celebra su aprendizaje y dile cosas agradables. Eso estimula el desarrollo físico y emocional.
Para calmarlo
¡De pucheros a sonrisas! A tu bebé le encanta responderte. Mueve la cabeza de arriba a abajo mientras le sonríes. Hazte el sorprendido y tápate la cara con las manos. Descúbrete y di: “¡Sorpresa!” Si tu bebé está triste, este tipo de juego puede convertir los pucheros en sonrisas.
A conocer su cuerpo
¡Enséñame! Mientras vistes a tu bebé, nombra y señala las partes de tu cuerpo y las de tu bebé. Señala la nariz de tu bebé y la tuya, y di: “¡Nariz!” Muy pronto podrás decirle a tu bebé, “¡Enséñame tu nariz!” y él lo hará.
La hora del baño
¡Es tu turno! Juega con tu bebé cuando metes sus juguetes en el agua al bañarlo. Pregúntale: “¿Me dejas jugar contigo?” Jueguen a dar y recibir juguetes. Di: “Gracias por compartirlo. ¡Ahora es tu turno!” Aprender a compartir desde muy pequeño desarrolla las destrezas sociales de tu bebé.