ORGANIZA TU VIDA CON UN BEBÉ
Cuando se tiene un bebé, las prioridades en la vida de una mujer cambian sin remedio. De pronto, el bebé se vuelve lo más importante del mundo y todo lo demás, incluyendo la pareja y uno misma, se vuelven secundarios.
Hay una trampa frecuente que debemos evitar después de tener al primer bebé.
El bebé es exigente y prioritario, sin la menor duda, pero es un error permitir que nos haga olvidar el tiempo, el cariño y la atención que debemos dar a papá y mamá.
El secreto: buena organización
Es cierto que la vida de una mujer se complica terriblemente con la llegada del bebé.
Parecería que apenas hay tiempo para atender todas las necesidades del recién nacido, que el día entero está dedicado a él y no queda tiempo para nada, ni para nadie más.
Y sin embargo, aunque tu bebé esté pequeñito y no te quieras despegar de él para nada, tendrás que irte acostumbrando a equilibrar su atención con todas tus otras actividades, incluyendo la atención a tu esposo y a tu persona.
¿Cómo encontrar tiempo y energía para todo?
Es simplemente cuestión de organización.
Por fortuna, la naturaleza es muy sabia y hace que los recién nacidos duerman la mayor parte del día, mientras su madre se organiza.
Y eso es lo que te toca a ti hacer: organizar meticulosamente tu tiempo de modo que te alcance para todo.
En cuanto tengas un momento disponible, debes hacer una lista de actividades, para irlas realizando según el tiempo que el bebé te deje disponible.
Entre las actividades prioritarias para ti está el cuidado de tu persona. Este cuidado debe cubrir varias áreas: tu cuerpo, tu rostro y tu apariencia.
Tus actividades diarias deben incluir el baño diario, por breve que sea, la aplicación de crema humectante y suavizante en todo el cuerpo, especialmente en las zonas del abdomen en donde aparecen estrías, y la aplicación de desodorante y alguna loción.
Consejos importantes
- Hazte un buen corte de pelo. Te sentirás bonita y animada.
- Maquíllate un poco cuando tu bebé esté dormido. Aunque no vayas a salir, te sentirás bien.
- Buena apariencia de la mañana a la noche. Evita quedarte en bata todo el día. Eso da apariencia de desaliño. Desde temprano, después de bañarte, ponte ropa cómoda, pero atractiva.
- El gran problema del sueño. La nueva mamá siente que nunca duerme lo suficiente. Si su bebé despierta a medianoche porque tiene hambre, y hay que darle de comer, la interrupción del sueño te altera negativamente y afecta tanto tu apariencia como tu estado de ánimo. Nuestra recomendación es que aprendas a dormitar varias veces a través del día, junto con tu bebé
- Aprende a pedir ayuda. Acepta que no eres la “mujer maravilla” y sé lo bastante humilde para aceptar la ayuda de todas las personas que te quieren, incluyendo tu marido.
- Enorgullécete de tu buena apariencia. Procura seguir siendo la muchacha bonita, esbelta y saludablemente coqueta que eras antes de tu embarazo. Ponte a dieta para bajar de peso, si lo necesitas (bajo la guía de tu médico) y trata de verte bien presentada en todo momento del día.
- Ámate mucho a ti misma. Eso es parte del amor que debes tener a tu bebé, porque la posesión más valiosa que él tiene eres precisamente tú.