Enséñalo a eructar
Es muy importante expulsar el aire que ha ingerido un bebé al comer, ya que mientras no lo haga estará incómodo e incluso dejará de comer y llorará.
Los bebés tragan aire todo el tiempo al succionar la leche de un biberón o cuando lloran. Cuando toman pecho es más difícil que traguen aire, aunque pudiera suceder. Muchas veces con sólo cambiarlo de posición, expulsará el aire y logrará descansar y dormir tranquilamente.
En ocasiones el bebé puede quedarse dormido plácidamente y no expulsar aire. No lo molestes despertándolo, tal vez no haya ingerido aire o despierte dentro de un rato para expulsar los gases. Levántalo y colócalo en posición vertical para que expulse el aire o bien colócalo boca abajo sobre tus rodillas para que dándole palmaditas en la espalda pueda hacerlo.
Si observas que frecuentemente tiene dificultades para eructar, procura ponerle durante más tiempo en posición vertical. Está comprobado que en los lugares donde hay costumbre de llevar al bebé sujeto en posición vertical, ellos mismos eructan sin necesidad de ningún truco.