Alimentación correcta
Por: Blanca Saint Martín Posada
El alimento y las generaciones
70´s
La incursión de los alimentos saludables en el mercado data de los años 70’s. En esta década comienza el interés por consumir alimentos cuyas características favorezcan la salud. En ese entonces, predominaba la búsqueda de alimentos “naturales” como los jugos, el yogurt, los panes de trigo entero, etc. Con el consumo de dichos productos se buscaba establecer un régimen de alimentación saludable que redujera la ganancia de peso y disminuyera el riesgo de enfermedades crónicas. Sin embargo, no se logró mantener un equilibrio entre la ingestión de alimentos y las necesidades nutrimentales de los consumidores, debido principalmente a la falta de orientación alimentaria que indicara la forma adecuada de incluir estos alimentos en la dieta.
80´s
Durante la década de los 80’s, la industria alimentaria desarrolla una nueva línea de productos, modificados en el contenido de las sustancias que se relacionan con la mayor incidencia de padecimientos crónicos. Surge una “segunda generación de alimentos saludables”, entre los que destacan los productos con menor o nulo contenido de grasas totales, grasas saturadas, colesterol, azúcar, energía y sodio. De nueva cuenta, la falta de información sobre el uso adecuado de estos productos impidió que se lograra el objetivo principal, que era la reducción de factores de riesgo dietéticos relacionados con el desarrollo de enfermedades crónicas como la obesidad, la diabetes, la hipertensión arterial, entre otras.
90´s
La “tercera generación de alimentos saludables” surge en la década de los 90’s, durante la cual, el conocimiento sobre las propiedades funcionales de ciertos alimentos genera el interés de la industria alimentaria por elaborar productos que además de ser nutritivos, contengan sustancias que se relacionan con la prevención de enfermedades. Así, se lanzan al mercado alimentos prebióticos, probióticos y nutracéuticos, entre otros, cuya ingestión proporciona un valor agregado al consumidor.
Generaciones de alimentos saludables
70’s: Primera Generación de Alimentos Saludables | Jugos naturales
Yogurt Pan integral |
80’s: Segunda Generación de Alimentos Saludables | Productos light
Bajo en grasa Bajo en azúcar Bajo en calorías |
90’s: Tercera Generación de Alimentos Saludables | Alimentos Funcionales /Nutracéuticos
Probióticos Prebióticos Esteroles Naturales Fibras |
Como consumidor, ¿Qué debo saber sobre los alimentos saludables?
Con respecto a la primera generación, la búsqueda de alimentos “naturales”, es decir, con muy poca industrialización, marcaba la tendencia. Los consumidores en ese momento reconocían a lo natural como saludable. Sin embargo, de cualquier alimento, no importa lo natural que sea, la cantidad consumida tiene mucho que ver con el éxito o fracaso de un régimen de alimentación recomendable. Evidentemente los jugos naturales, pueden contener cantidades significativas de vitaminas, pero deben de consumirse de manera inmediata para que estos nutrimentos se pierdan lo menos posible. Además, aunque sea natural, su contenido de calorías cuenta y un exceso en el consumo, puede redundar en la ganancia de peso. Finalmente las calorías son calorías.
Por lo tanto, la moderación en el consumo de los productos de esta categoría como de las otras dos, es la base para lograr una alimentación correcta.
Sobre la segunda generación, es importante que el consumidor distinga que los productos light contienen calorías, en menor proporción que el producto original, pero las contienen. Por ejemplo, una mayonesa light, sólo tiene 30% menos de la grasa que contiene una mayonesa tradicional. En términos generales, los productos modificados en grasa sólo reducen una porción de las calorías totales, por lo que NO deben ser consumidos a libre demanda. Caso aparte son las bebidas endulzadas con edulcorantes sintéticos, en las que el contenido de azúcar ha sido sustituidoo totalmente por una fuente de sabor sin calorías. Sin embargo, los alimentos modificados en azúcar y grasa, como los yogurts light, contienen calorías y también debe controlarse su consumo.
Por último, la tercera generación de alimentos saludables incluye una serie de conceptos nuevos para el consumidor, que conviene explicar:
Alimento funcional: Este concepto es utilizado por la industria de alimentos para describir una categoría de productos que brindan buena nutrición a un mercado de consumidores conscientes de su salud. El concepto nace como un término pragmático más que de la regulación de profesionales de la nutrición, por lo que existen diversas acepciones y no una definición descrita por autoridades en la materia. Una definición aceptada es…”alimento o ingrediente que contiene cantidades significativas de compuestos biológicamente activos que aportan beneficios para la salud, además de nutrición”… Cabe destacar que la palabra “funcional” se relaciona con el efecto positivo del alimento sobre las funciones del organismo.
Prebiótico: ingrediente alimenticio no digerible que afecta benéficamente al huésped, porque estimula selectivamente la actividad y/o crecimiento de un número limitado de bacterias en el colon que tienen el potencial de mejorar la salud del huésped. Con frecuencia, el prebiótico es una mezcla de hidratos de carbono no digeribles con factores bifidogénicos (lactobacilos, por ejemplo), los cuales son fermentados en el colon y promueven una flora intestinal saludable.
Probióticos: son preparaciones microbianas elementales que son usadas como aditivos en los alimentos o en la producción de estos (complementos alimenticios).
Nutracéutico: es la combinación de la palabra nutrimento con farmacéutico, y se dice de los nutrimentos que tienen funciones preventivas en la aparición de enfermedades crónicas.
Recuerda, el éxito de estos productos depende del uso adecuado y la incorporación correcta dentro de nuestra alimentación. Si lo que deseas es obtener los mayores beneficios de la inmensa gama de productos saludables, consulta a un especialista antes de tomar la decisión de incluirlos en tu dieta.
Por otra parte, ningún alimento por sí sólo es mágico, el control de peso y la prevención de enfermedades crónicas se logra a través del establecimiento de un estilo de vida saludable, que incluye la realización de actividad física, la eliminación de hábitos como el tabaquismo y el consumo de bebidas alcohólicas y por supuesto, una alimentación adecuada.
Fuente:
- Fair RTD, ILSI. Functional Food Science and Behavior and Physiological Functions Br J Nutr, 80 (suppl 1), 1998.
- IFIC Functional Foods: Opening the Door to Better Health Food Insight (serial on line)https://www.ificinfo.health.org