Dicen que la vida se construye con detalles. Lo cierto es que los detalles, —entendidos como actos y rituales de generosidad—, tienen el poder de revitalizar la calidad de vida familiar. Existe una diferencia entre proveer a la familia de lo que necesita y dar generosamente. Generosidad es dar más allá de las expectativas y de lo que se necesita fundamentalmente, es ser sensibles a las necesidades de los demás y tratar de colmarlas. Los padres tienen un talento especial para ser generosos con los hijos; y muchas veces les dan más allá de sus posibilidades materiales o físicas. Pero a medida que los hijos crecen y se vuelven más independientes, olvidamos que todavía les podemos dar generosamente para que sientan nuestro respaldo.

Generosos detalles

Ser naturalmente generosos con los hijos no significa que sepamos traducir esa actitud hacia la pareja. Durante los años de crianza de los hijos, los padres frecuentemente se ven tan dedicados a ellos, que las necesidades de la pareja pasan a segundo plano. Son los rituales y acciones que demuestran generosidad, los que se imprimen en la mente de la gente que amamos. Al igual que el hijo siempre recordará cómo la madre faltaba a su trabajo cuando él enfermaba, el esposo no olvidará cuando ella le compró con su primer sueldo ese reloj que él tanto anhelaba.

La generosidad puede demostrarse de muchas maneras: dar a otra persona el regalo de nuestro tiempo, de nuestra ayuda o de nuestro conocimiento de manera desinteresada. Al dar a los demás sin restricciones, les demostramos el valor que tiene para nosotros la relación con ellos, y es una manera de fortalecer los vínculos. Aunque algunas personas son más generosas por naturaleza, el arte de dar también puede ser aprendido. Si fomentas en tu hogar un ambiente en que las acciones que impliquen compartir se aprecien y aplaudan, estarás enseñando una valiosa lección a tus hijos. Las siguientes son algunas ideas de detalles que las personas a tu alrededor recordarán por siempre:

Detalles para la pareja

• Llama a su estación de radio favorita y dedícale una canción.
• Envíale un arreglo floral con un mensaje. .
• Cuando obtengas un ascenso o tengas algún triunfo agradece el apoyo de tu parej
• Hazle un regalo con tus propias manos.
• Dale un cupón para que tú hagas por él o ella algún favor que necesite.

Detalles para tu hijo

• Mándale cartas con tiras cómicas, chistes, adivinanzas, o cualquier cosa que le guste, donde le digas cuánto la/lo quieres.
• Enmarca alguno de sus dibujos, exhibe los nuevos trabajos en el refrigerador.
• Invítala/o a tu trabajo por un día.
• Llévala/o a ver su película favorita.
• Sé el anfitrión de una pijamada con sus amigos, o llévalos a tomar helados.

Detalles con los abuelos y suegros

• Lleva a tus hijos —los nietos— a visitarlos frecuentemente.
• Sé generoso con sus cumplidos.
• Asegúrate de que siempre tengan fotos recientes de los nietos.
• Pídeles que te permitan grabar un video de ellos contando su historia; explica que será un regalo muy valioso para tus hijos.
• Háblales para pedir su consejo.
• Coloca pequeños obsequios en sus lugares de la mesa cuando vengan a comer.
• Recuerda las fechas relevantes para ellos, y no solamente las festivas.

Para fortalecer los vínculos con familiares y amigos

• Crea un medio de comunicación familiar. Puede ser un boletín o un chat familiar, no importa. Por este medio se difundirán las noticias relevantes para toda la familia, además de fotos, recetas y anécdotas.
• Agenda los cumpleaños de todos en la familia para que no los olvides.
• Cenas familiares. Asigna un día a la semana para juntar a toda la familia o a un grupo de amigos. La cena no tiene que convertirse en un engorro: roten las casas y pide a cada miembro que traiga un platillo.
• Busca compañía. Para convivir no es necesario dejar a un lado las obligaciones. Compara listas de quehaceres con tu mamá y hagan equipo. Acompáñala al centro comercial a buscar el regalo que ella necesita, luego pueden ir al supermercado a hacer las compras.