Cuidado con las medicinas
Por: Dr. Jaime Cortina Watson
Los medicamentos tienen fecha de caducidad porque es el compromiso del laboratorio, que garantiza la eficacia y estabilidad del producto, así como su almacenaje en forma correcta, ya que después de esa fecha no hay garantía de la calidad del fármaco.
Existen medidas preventivas en el manejo de medicamentos:
- Siempre verificar la fecha de vencimiento del medicamento antes de usarlo; en caso de no encontrar la fecha es mejor desecharlo.
- Desechar todos los medicamentos que no tienen etiqueta, fecha de caducidad y que no los puedes identificar.
- Desechar los medicamentos que en algún miembro de la familia hayan producido reacciones potencialmente graves, como alergias o algún otro problema.
- Tirar todos los medicamentos caducos a la basura, tomando en cuenta que no estén al alcance de los niño o de las mascotas. De preferencia hacerlo separadamente.
- Todos los medicamentos que se venden en forma de polvo que ya hayan sido disueltos en agua deben desecharse, ya que el tiempo de estabilidad es muy corto 5-10 días.
- Los medicamentos se deben guardar en lugares frescos, oscuros y fuera del alcance de los niños. El baño y la cocina no son lugares apropiados, ya que el calor y la humedad pueden afectarlos.
- En caso de medicamentos en forma de suspensión, la caducidad es más larga si se guardan refrigerados. El resto de los medicamentos no se deben almacenar en los refrigeradores, a menos de que así se especifique.
- Siempre guardar los medicamentos en los envases originales, para evitar confusiones, ya que si se mezclan pueden alterarse.
- Desechar el tapón de algodón que viene dentro de los frascos de medicamentos, porque puede atraer la humedad del ambiente hacia el interior de la botella.
- Si no sabes dónde debes almacenar un medicamento, consulta al pediatra
- Todos los medicamentos incluyen información sobre el almacenaje apropiado en la etiqueta o en el instructivo anexo. Estas instrucciones como “ manténgase en refrigeración” o “ no se deje al sol “ deben seguirse al pie de la letra, si se busca que el medicamento siga siendo eficaz.
- Nunca consultar tratamientos o medicamentos en Internet, ya que el criterio médico de las prescripciones es muy importante para evitar efectos indeseables.
- Evitar siempre la auto receta o las recetas de las vecinas, primas, amigas y familiares .
Cuidados en casa para las medicinas y la automedicación?
A los pequeños les gusta explorar y experimentar, por lo que es muy importante que todos los medicamentos, productos de limpieza, thiner, gasolina y otros químicos se guarden en un lugar con llave, o en un lugar alto, donde los pequeños no puedan alcanzar.
Es muy importante el cuidado de los medicamentos, así como evitar las auto recetas en la infancia, ya que son potencialmente graves y pueden causar problemas muchas veces irreversibles.
Igualmente hay gran cantidad de medicamentos y alimentos que son potencialmente tóxicos y que han causado grandes tragedias, como la talidomida, que hizo estragos en recién nacidos en la época de los 60’s. Igualmente podemos encontrar muchos otros que han sido retirados del mercado, especialmente en EUA como:
- La Cisaprida, por efectos cardiotóxicos,
- Las pirazolonas, que producen daños hematológicos,
- Medicamentos a base de bismuto, que son tóxicos para el riñón,
- Medicamentos contra la gripa que contengan Phenylpropanolamina, que pueden producir accidentes vasculares cerebrales,
- Cloramfenicol, que puede producir daños hematológicos muy severos
Existen algunos medicamentos que deben usar únicamente los adultos, como la Ciproxina, las Tetraciclinas (ya que detienen el crecimiento), la aspirina ( Ácido acetil salicílico, que está contraindicado en niños, ya que puede causarles una enfermedad sumamente grave llamada REYE).
Por otro lado hay productos naturales como el anís estrella o la miel de abeja, que aparentemente son inocuos y que son prescritas por las abuelas a las madres sin saber la toxicidad que llegan a tener y que pueden causar muertes súbitas en bebés lactantes.
Concluyendo, es muy importante consultar al pediatra para evitar problemas que pudieran llegar a ser potencialmente graves, antes de dar cualquier medicamento o remedios aunque éstos parezcan inocuos.
Fuente: Excelencia, Marzo/Abril 2003, Año X, revista No. 71